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Mis redes sociales son un cactus

Mis redes sociales son un cactus

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A mí me gustan mucho los cactus. Hay de muchos tipos, me parecen bonitos, interesantes y algunos tienen flores muy lindas. La ventaja que muchos le ven a los cactus es que, honestamente, son las plantas que pueden cuidar correctamente. Un cactus necesita poquita agua, y por ende, lo podés atender bien si es que disponés de poco tiempo para hacerlo.

Hace unos días sentí eso, que mis redes sociales son un cactus, y me gustó la analogía. Actualmente publico lo que muchos considerarían demasiado poco.  Es más, con tanto material que tengo de El Viaje, hasta se podría ver como un desperdicio no publicar más. ¿Pero cuál es la realidad? La verdad, sí me gustaría publicar al menos un poco más; pero actualmente, la cantidad en que lo hago es en parte una decisión. Es el tiempo que puedo y decidí dedicarles, luego de organizar todos los ámbitos en mi vida (profesional/personal/etc.).

Un pequeño cactus se puede hacer notar en un jardín repleto

Hace unos años, llevé a una de mis abuelitas a un jardín botánico. Fue un poco de sorpresa, lo cual sumó a que ella llegara muy feliz e ilusionada. Aún así, no me imaginé que lo que más le llamaría la atención sería la sección de los cactus. Sentí que se iba a tostar bajo el sol, por estar queriendo estar ahí de pie, viendo todos los detalles, incluso del cactus más pequeño. De hecho al final hasta se llevó uno para la casa. ¡De la tienda, no del jardín!

Yo sé que no a todas las personas les gustan los cactus; talvez muchos no los encuentran interesantes, ni siquiera para detenerse a verlos y menos para tenerlos. Pero para todo “roto hay un descosido”, como dice el dicho, y por esto es que sé que mi jardín en crecimiento tiene, y seguirá sumando, visitantes y seguidores.

¿Es suficiente tener una red cactus?

No me engaño. Sé que actualmente, el marketing y los mismos algoritmos de los sistemas, hacen que la gestión de redes sociales esté presionada hacia la metodología de publicar muy a menudo. Tiene sentido matemáticamente hablando, la verdad. Pero quizá haya una forma diferente de hacer las cosas. Estoy segura que hay más profesionales y negocios que quieran generar contenido así, con calma. Tal vez más adelante, el modelo de comunicación de los negocios energizados en RRSS cambie. Pero quizá no, no lo sabemos. Por eso hay que estar en paz, con lo que estamos queriendo y pudiendo hacer ahora mismo.

Personalmente, sé sobre la presión profesional del consejo de publicar mucho; y sí, es verdad que pasa factura de vez en cuando. Ahí llega la ola u oleajes de culpa, de duda, de si estás haciéndolo bien. A mí, por ejemplo, lo que me pasa es que me desespero un poco de vez en cuando, porque me gusta mucho compartir información, como te decía, y tengo muchas ideas para próximas publicaciones. Por ende, sí me gustaría publicar al menos un poco más. Pero repito: hay que estar en paz con lo que decidimos, también con lo que debemos hacer y lo que podemos hacer.

De momento, mis redes sociales son un cactus por decisión, no por falta de tiempo. Es que me cuido mucho con lo de decir que “no tengo tiempo”, porque muchas veces esa no es la verdadera razón, o no de esa forma literal. El tiempo lo tengo. Es decir, tengo las mismas 168 horas por semana que tenés vos o alguien que publica 10 veces al día. Pero de ese tiempo, hago una repartición justa y necesaria según mis circunstancias, y así como están las cosas para mí, es como pueden y deben estar.

Por cierto: Escribiendo este artículo me pregunté si las personas que no usan sus RRSS como negocio o proyecto, también sienten la presión de publicar a menudo. Yo quisiera que no fuera así, pero bueno, sé que es muy probable que pase más de lo debería. Si es tu caso, ojalá que con más razón mi artículo te de algo de tranquilidad.

Poquito también es bendito

¿Qué más quiere decir que mis redes sean un cactus?

Otra de mis abuelitas dice: “poquito porque es bendito”. Ese refrán se refiere a que, si se tiene poca cantidad de algo, o bien no se quiere gastar lo que hay, entonces se usa o sirve poca cantidad. Es bendito, entonces lo cuidamos para que no se agote. En mis redes, yo no es que esté buscando dosificar las publicaciones por ninguna razón particular. Sin embargo, definitivamente si es que voy a publicar poco, entonces lo haré tratando de hacerlo bien y que sea valioso. Es preciado para mí porque cada vez que publico lo hago con mucha entrega y paciencia; y de igual forma espero que sea preciado para quienes reciben mi contenido, porque lo encuentran útil y aplicable.  

Por todo esto, es que para el caso de este artículo yo quisiera decir: “poquito también es bendito”. Porque, aunque mis RRSS tengan poca actividad, a criterio de muchos, las he ido haciendo crecer a su ritmo particular y están vivas. Las atiendo con mucho cariño, y trato de que se mantengan sanas y ordenadas. Me gustan, y la analogía de “mis redes son un cactus” me llegó con un aire de tranquilidad, me dio paz, por eso me gustó.

Eso sí, constancia y consistencia en la gestión de redes sociales

La definición de “constancia” no te indica una frecuencia específica. Ser constante significa mantenerse realizando la acción o actividad que decidimos hacer. En este caso, significa que la gestión de redes sociales que hagamos para nuestro negocio o proyecto, va a estar enfocada en publicar con la frecuencia que hayamos estimado y decidido.  El cactus necesita poca agua, ¡pero tampoco sobrevivirá para siempre sin recibir una gota!

Ahora bien, si -o cuando- eventualmente llegue a aumentar la cantidad de publicaciones, quiero que la prioridad siga siendo crearlas con la misma dedicación que ahora; y esto último me lleva a otro tema muy importante, que es la consistencia.

Podría estar bien no publicar cada día, pero es vital tener consistencia. Es decir, que lo que comunicamos sea coherente entre sí, con nosotros como creadores, con el negocio, proyecto o servicio, y con las metas que tenemos para este. En este punto, ya tendría que estirar demasiado la analogía del cactus para que me alcance para el tema de ser consistentes, así que nos quedamos con lo literal que te acabo de mencionar. Este tema de la coherencia en las publicaciones, me gusta e interesa mucho, así que en otras publicaciones lo vamos a seguir conversando ¿ok?. Porque incluso, puede llegar un momento donde para ser consistentes/coherentes con algún objetivo del negocio o proyecto, sea necesario aumentar la frecuencia de publicaciones.

Para terminar:

Si te apetece, déjame un comentario aquí o en el post de Instagram y me contás qué tipo de red o redes sentís que tenés. ¿Cómo te sentís respecto a la cantidad de publicaciones y actividad que estás teniendo en ellas actualmente? Hacer ejercicios como estos, con una analogía, podrían generarte ideas para reflexionar sobre los siguientes pasos para cumplir tus objetivos, ya sea respecto a la gestión de redes sociales o de tu negocio en general.

¿Sabés qué más siento?

Confianza. En que por más poquito que publiquemos, es casi fijo que a alguien llegará nuestro mensaje, y finalmente incluso si llegáramos a miles de personas, siempre es una a la vez a quién le comunicamos algo ¿no?. Es a “esa” persona, que sacó el rato para vernos o escucharnos, a quién le ayudamos, le enseñamos algo, facilitamos su vida o trabajo, la acompañamos, le contamos una historia o compartimos una foto. Una persona ya es todo. Igual que el día que llevé a mi abuelita a ese jardín en su cumpleaños, y la hizo tan feliz ver los cactus, como pasear conmigo. Porque ahora que lo pienso, en ese paseo fuimos como un cactus, y tuvimos la suerte de pasar un ratito muy bendito.

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